Páginas

5.28.2015

Tardes, noches y madrugadas.

Después del tiempo que estuvimos separados, por el destino, o por nosotros, volvimos a encontrarnos.
Tanto tiempo pasó... Años, meses, infinitas horas en las que deseé volver a hablarle, volver a escuchar su voz, volver a mirar sus ojos, volver a rozar su mano... Volver a eso que no tuvo lugar en aquel momento.

Tardes, noches y madrugadas duró 'el reencuentro'. No costó nada hacer como si nada hubiera pasado, ni siquiera el tiempo. Todo igual, todo como antes. Volvimos a lo anterior, volvimos a eso que no tuvo lugar, ni antes, ni en ese momento.

Ilusiones. Mensajes. Palabras cariñosas. Canciones románticas. Saludos fríos llenos de amor. Promesas de un futuro inexistente. Todo eso terminó. Distancia. Aburrimiento. Tercerxs y cuartxs en discordia.

Pero volvimos... A lo anterior... A eso que no tuvo lugar en algún momento.

Y sí... Más tardes, más noches, más madrugadas. Más ilusiones, más mensajes, más palabras cariñosas, más canciones románticas, más saludos fríos llenos de amor... Y más promesas de un futuro inexistente.

Nos íbamos y volvíamos de igual manera, siempre... Siempre como si nada pasara. Ahí, en el momento indicado, buscaba el "qué"...
¿Qué somos? ¿Que fuimos? ¿Qué seremos?

Nada, nada y nada. Todo había terminado... No más tardes, noches ni madrugadas. En su momento se sentía placentero 'estar' y 'no estar' al mismo tiempo. Era algo desconocido que inspiraba curiosidad y fascinación.

¿Y hoy? Somos dos desconocidos que se saben de memoria. Somos dos personas que siempre vuelven. Somos eso que atrae y que lastima en algún lugar.
Fuimos eso a lo que no se le pone nombre... Fuimos alegría, fuimos ternura, fuimos compañerismo, fuimos tristezas, fuimos peleas, y fuimos amor.
Seremos recuerdos... Recuerdos de esos que son imborrables, de esos que sacan una sonrisa en cualquier lugar... Recuerdos que se mantienen vivos, a pesar de la distancia.

... De esos amores imposiblemente posibles... De los que no sabemos qué esperar... De los que queremos todo... De los que quedan ahí, guardados... De los que hacen daño pero son adictivos... De los que cuesta, pero se logra salir.

No más tardes, noches ni madrugadas... Y lo mejor de todo, no más promesas de un futuro inexistente.

........

Marian-

No hay comentarios.: